La
comunicación entre una pareja
Es verdad
el dicho que dice: Dos no se pelean cuando uno no quiere,
o para pelear se necesitan dos. En parte eres responsable
del comportamiento de tu pareja, si realmente te molesta,
intenta influir de manera más positiva para no entrar
en conflictos que puedan desgastar tu relación. Las
discusiones se pueden evitar. Cuando tu pareja hace algo
que te molesta seriamente, lo mejor es que te relajes, esperes
un rato para no contestar en caliente y piensa muy bien
lo que vas a decir porque puede empeorar las cosas.
En una
relación la comunicación es fundamental, las
cosas hay que hablarlas tranquilamente. Reflexionando sobre
lo sucedido e intentando buscar soluciones a los problemas
que se puedan presentar. No comunicarte con tu pareja es
el peor error que puedes cometer. Por ejemplo, si llegas
a casa y, sin saludar, te sientas a ver la televisión,
estás comunicando enfado o indiferencia. Es por eso
que también hay que cuidar la comunicación
no verbal tanto o más que la verbal. Recuerda que
la buena comunicación es la que permite que el otro
perciba lo que queremos comunicarle.
Especifica
lo no te agrada de la conducta de tu pareja, pero al mismo
tiempo pon énfasis en lo que te gusta. Pon ejemplos
concretos para que entienda de lo que le estas hablando.
Realiza
peticiones pero no exijas. Las peticiones muestran respeto
por el otro y así es más fácil que
tu pareja quiera colaborar. Escucha al otro cuando habla.
No le interrumpas.
Haz preguntas
y sugerencias, no acusaciones. Las acusaciones ponen a las
personas a la defensiva y no ayudan a encontrar soluciones.
No intentes adivinar el pensamiento del otro, es mejor que
le preguntes lo que siente.
Habla
de su comportamiento, no de su personalidad. El objetivo
es cambiar conductas para mejorar la relación, no
criticar su personalidad.
Plantea
los problemas cuando surjan, no los acumules o llegará
un momento en el que explotarás. Ofrece soluciones
a las dificultades y trata de llegar a un acuerdo que satisfaga
a ambos.
Acepta
tus fallos o tus responsabilidades. Todos tenemos derecho
a cometer errores o a tener limitaciones. Es posible que
la culpa del problema sea compartida y no sola de tu pareja.
- Pregúntale
a tu pareja qué puedes hacer para mejorar las cosas.
Evita criticar sus propuestas o comentarios. Céntrate
en lo actual y no pongas sobre la mesa problemas pasados.
- Busca
un ambiente cálido y apropiado para hablar de cosas
que suelen ser conflictivas.
Artículos
para la mujer de hoy
si
quieres enviar tu artículo escribenos a info@10mujeres.com
|